La Navidad es un momento perfecto para recordar clásicos del cine que nos hacen reír y reflexionar. Entre ellos destaca "Mi Pobre Angelito", una comedia entrañable que narra cómo un niño, Kevin, queda solo en casa durante las fiestas y debe enfrentarse a dos ladrones con creatividad y valentía. Pero, ¿qué enseñanzas podría ofrecernos esta historia si la trasladamos al ámbito de la ciberseguridad?

En la película, Kevin aprovecha todo lo que tiene a su alcance para proteger su hogar. Desde trampas caseras hasta estrategias ingeniosas, demuestra que el ingenio puede marcar la diferencia ante amenazas inesperadas. De manera similar, en el mundo digital cada uno de nosotros enfrenta retos constantes para salvaguardar nuestros "hogares virtuales" frente a intrusos digitales.

Los ciberdelincuentes, como los torpes Harry y Marv, buscan vulnerabilidades en nuestras defensas digitales. Sus métodos varían desde intentos de suplantación de identidad hasta el uso de software malicioso. Sin embargo, la historia nos enseña que incluso los ataques más persistentes pueden ser detenidos con creatividad y preparación.

Kevin nos recuerda también la importancia de la autonomía. Aunque joven, es capaz de enfrentar los desafíos por sí mismo. En el mundo digital, este principio se traduce en asumir responsabilidad por nuestra propia seguridad: usar contraseñas robustas, activar sistemas de doble autenticación y mantener actualizados nuestros dispositivos.

Por supuesto, la película también subraya el valor de la conexión humana. Al final, Kevin se reúne con su familia, recordándonos que no estamos solos en la lucha contra las amenazas. La colaboración y el intercambio de información son fundamentales para fortalecer un ecosistema digital más seguro.

La ciberseguridad, es una adecuada implementación de procesos, personas y tecnologías; Como lo hizo Kevin: Tenemos a nuestro alcance las personas y procesos que nos permiten abordar una postura de ciberseguridad y por el lado de la tecnología, como un buen inicio, la siempre dispuesta comunidad OpenSource ofrece un abanico de grandes soluciones de ciberseguridad. Se cómo Kevin, revisa tus vulnerabilidades, ¡crea tu plan y acciona! No permitas los que los “ladrones mojados” se lleven tus cosas.

Esta Navidad, reflexionemos sobre las lecciones de esta icónica película. Asumamos el rol de proteger nuestro espacio digital con la misma creatividad y determinación que Kevin defiende su hogar. Y recordemos, como diría nuestro joven protagonista: "¡Este es mi hogar, debo defenderlo!".