Octubre marca el inicio del Mes de la Ciberseguridad, una iniciativa global que busca concientizar a muchos usuarios y pequeñas, medianas y/o grandes empresas sobre la importancia de proteger la información en un mundo cada vez más digitalizado. En 2024 con el aumento de las ciber amenazas y la constante evolución de la tecnología, este mes adquiere una relevancia crucial para todos los actores involucrados en el ecosistema digital.

La importancia de la ciberseguridad en 2024:

El presente año ha sido testigo de un crecimiento exponencial en el uso de tecnologías digitales. La transformación digital, acelerada en los últimos años, ha traído enormes beneficios, pero también ha dejado expuestos a usuarios y organizaciones a riesgos cibernéticos cada vez más complejos. Desde ataques de Ransomware que paralizan infraestructuras críticas hasta violaciones de datos que afectan a millones de personas, el panorama de la ciberseguridad sigue siendo uno de los desafíos más grandes que enfrentamos en la actualidad.

Las estadísticas respaldan esta creciente preocupación: se espera que para finales de 2024, los ataques cibernéticos causen pérdidas globales superiores a los 10 billones de dólares. Este número alarmante pone de manifiesto la necesidad urgente de adoptar medidas de protección tanto a nivel personal como empresarial.

Referencia: https://cybersecurityventures.com/top-5-cybersecurity-facts-figures-predictions-and-statistics-for-2021-to-2025/

Principales amenazas cibernéticas en 2024: El Mes de la Ciberseguridad 2024 pone de relieve algunas de las amenazas más significativas del año:

Ransomware avanzado: Los ataques de Ransomware se han vuelto más sofisticados, dirigidos no solo a grandes empresas, sino también a pequeñas y medianas organizaciones que a menudo carecen de los recursos necesarios para defenderse. Los cibercriminales no solo cifran los datos, sino que ahora también los roban, extorsionando a las víctimas para que paguen bajo la amenaza de exponer información sensible.

Suplantación de identidad (phishing): Aunque no es una táctica nueva, el phishing sigue siendo una de las amenazas más comunes. Los correos electrónicos fraudulentos, mensajes de texto engañosos, páginas web falsas, entre otros continúan siendo las principales herramientas utilizadas por los atacantes para obtener credenciales de acceso o información personal.

Ataques a infraestructuras críticas: Con la creciente dependencia de la tecnología en sectores clave como la energía, las telecomunicaciones y la salud, las infraestructuras críticas son un blanco atractivo para los ciberdelincuentes. La protección de estos sistemas es esencial para garantizar la continuidad de los servicios esenciales.

Riesgos asociados a la inteligencia artificial: La inteligencia artificial (IA) está impulsando avances en numerosos sectores, pero también se está utilizando para perfeccionar ataques cibernéticos. Los atacantes emplean IA para automatizar y personalizar ataques, lo que aumenta su efectividad y dificultad para ser detectados.

Ciberseguridad en Chile: avances y desafíos:

En Chile, la ciberseguridad ha ganado protagonismo en los últimos años, impulsada por iniciativas gubernamentales y corporativas que buscan fortalecer la defensa contra amenazas digitales. La promulgación de la Ley Marco de Ciberseguridad N° 21.663 ha sido un paso significativo, estableciendo directrices claras para la protección de infraestructuras críticas y la creación de capacidades de respuesta ante incidentes cibernéticos.

Ley de Marco de Ciberseguridad: https://www.bcn.cl/leychile/navegar?idNorma=1202434

Este marco legal ha sido fundamental para mejorar la ciberseguridad en sectores clave del país. Sin embargo, el desafío persiste: muchas empresas, especialmente las pequeñas y medianas, aún no han implementado medidas de seguridad robustas y siguen siendo vulnerables a los ataques.

Reforzando la resiliencia digital:

El Mes de la Ciberseguridad 2024 es una oportunidad para reflexionar sobre la importancia de proteger nuestra información y sistemas. La ciberseguridad ya no es solo responsabilidad de los equipos de tecnología o de los expertos en seguridad; cada individuo, desde el usuario común hasta el CEO de una gran empresa, tiene un papel que desempeñar.

A lo largo de octubre, el mensaje es claro: la seguridad comienza con nosotros mismos. La implementación de prácticas simples, como el uso de contraseñas seguras, la activación de autenticación en dos pasos y la actualización regular de sistemas y dispositivos, puede hacer una diferencia significativa en la protección de nuestros datos.

Además, las organizaciones deben seguir invirtiendo en formación y concientización para sus trabajadores, ya que el factor humano sigue siendo el eslabón más débil en la cadena de seguridad. Programas de capacitación en ciberseguridad, simulaciones de ataques y la implementación de políticas de seguridad claras pueden ayudar a mitigar los riesgos.

Hacia un futuro seguro:

La tecnología continuará evolucionando y con ella las amenazas cibernéticas. Sin embargo, también evolucionan las herramientas y estrategias para hacer frente a estos desafíos. La colaboración entre sectores público, privado y las academias serán clave para fortalecer la ciber resiliencia de las naciones y organizaciones en los próximos años.

El Mes de la Ciberseguridad 2024 no es solo una campaña de concientización, sino un recordatorio de que la ciberseguridad es una responsabilidad compartida y un esfuerzo continuo. Proteger nuestros datos, redes y sistemas es esencial para garantizar que el cibermundo en el que vivimos sea seguro y confiable para todos.

Y tu ¿Cómo te protegerás?